Suelo Radiante

Con respecto a otro sistema de calefacción, el suelo radiante presenta una serie de ventajas que lo hacen particularmente intereante: el calor aportado es uniforme en toda la vivienda, es invisible, lo que ayuda a mejorar la condición estética de un lugar, es limpio puesto que no provoca convección en el aire, eliminándose así la circulación del polvo, es apto para niños pues pueden jugar tranquilamente en el suelo sin que los coja el frío y además no requiere ningún tipo de mantenimiento. Su instalación se realiza a través de unas planchas aislantes situadas en el suelo, sobre las que van distribuidos unos tubos de polietileno reticulado que serán los que transporte el agua caliente y transmitan el calor a las distintas estancias. Además, el confort que obtiene nuestros clientes mediante este tipo de calefacción es ideal.